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Hay un texto que quiero escribir hace un tiempo, sobre las primeras veces con alguna aventura, sea un juego, serie, película o libro. Creo que todos los hemos tenido, un día como cualquier otro nos cruzamos con una obra que cambia un pedacito de nuestras vidas por completo, que nos hace sentir cosas, guardar recuerdos y en general, pasar un buen rato. Pero que una vez que se acaban, sabes que no la podes volver a experimentar, no tanto por que no puedas volver a poner esa obra, sino por que, el hacerlo no va a dar la misma experiencia que en el original. Para mí una de esas experiencias es el juego Journey, una aventurita de la que ya escribí hace un tiempo (Uno de los que considero de mis mejores escritos), pero que de vez en cuando reaparece en mi cabeza y me saca una sonrisa, y un poco al igual Journey, entré sin mucha idea a Sable, de hecho, menos, lo único que sabía era que lo presentaron en algún E3, pero por la estética y “aura” que emite el juego me imaginé que iba a ser algo especial, y definitivamente lo fue.

Para empezar, la forma en la que están escritas las conversaciones en este juegos es perfecta, no se siente “actuada” ni “escrita” por nadie,

Da la impresión de ser una conversación normal entre personas, y las opciones que te dan para elegir nunca me hicieron sentir que lo que mi personaje decía estaba fuera de lugar, todas las opciones tenían pinta de ser algo que mi personaje o yo diría.

La primera conversación que tuve con otra persona fue con Jadi, bajita y encorvada, me recibió con una cálida sonrisa, y la actitud de una persona que te conoce de toda una vida, y así fue, sin muchas explicaciones, solo nuestra conversación y los pensamientos de mi personaje, supe que Jadi conocía a Sable mejor que la palma de su mano, sabiendo exactamente qué palabras decir y cuándo, y pudiendo predecir casi cada pensamiento que pasaba por la cabeza de mi personaje, sus miedos e inquietudes

y acá es cuando el juego me empezó a pegar con fuerza, y es que los pensamientos de mi personaje no sólo tenían sentido, dentro de la historia, sino que, eran casi idénticos a los que yo estaba teniendo mientras jugaba, ella no sabía qué mundo le esperaba fuera, y yo tampoco, extrañamente, al margen de la obvia conexión entre personaje – Jugador, desde esta conversación el juego se empezó a sentir como que me habla a mí, directamente, y no me refiero a, “el jugador que controla a sable”, más bien, a “Nicolas, la persona experimentando este juego”, las inquietudes de mi personaje con relación a su mundo, reflejaban mis expectativas, obviamente en una menor medida, ya que yo estoy del otro lado de la pantalla, pero igual, no se si fueron los gráficos, el ambiente, los personajes o todo junto, me empecé a sentir personalmente parte de la historia. Jadi me da unas palabras y ánimos para arrancar mi viaje, me subo a mi recién adquirido vehículo de entrenamiento y me voy a explorar un poco, y tengo que decir, por enésima vez, este juego es hermoso, las texturas planas, con bordes remarcados, poca música y mucho sonido ambiental diegético. 

Sable tiene conversaciones con todos, hasta que le toca hablar con Sizo, una maquinista, que nos enseña cómo construir una aeromoto. Y este es otro caso en donde los diálogos brillan con más fuerza, claramente nuestra protagonista admira a Sizo, y los diálogos lo dejan bien claro, no solo eso, sino que esa relación que tienen me llego hasta a mí, al punto en que mi opinión de Sizo resonaba con la de Sable. Vuelvo con Jadi una vez más, que me explica sin decirlo, la naturaleza de mi aventura, estoy buscando “emblemas”, con tres de ellos armo una mascara, cada una está asociada con algún oficio y al final de mi viaje la que elija va a definir la ruta de vida de mi personaje. La idea de tener que decidir el futuro de mi vida se me hace un poco incomodo solo de pensarlo, pero Jadi casi leyendo mi mente me dice que no tengo por qué tomar una decisión de golpe, que pruebe todo, y al final tomé una decisión, pero sobre todo, que disfrute de mi camino

con esto estamos listos para arrancar nuestro viaje, durante todas las conversaciones se siente un aire de tristeza y miedo al futuro, como un último adiós antes de que nuestras vidas se separen para siempre y esta sensación se me pego, al punto que me asegure haber hablado con todo el mundo antes de irme, para que nadie se quedara sin un adios.

El inicio de la aventura, y con esto me refiero al momento donde arranca “de verdad”, cuando tenes tu propio vehículo y rienda suelta para ir a donde quieras y cuando quieras, es increíble, la transición entre el hogar y lo desconocido, la música que arranca en el momento justo y el control de la moto que es espectacular, al principio miré mucho la brújula para saber donde ir, pero después de un rato simplemente miraba al horizonte e iba en las direcciones que parecían tener cosas interesantes, y es que el diseño del mapa es super intuitivo, podes ver de todo desde todos lados, y siempre tenes algun punto de referencia, para saber desde donde venís y a dónde vas. Todas las estructuras del mapa son únicas, desde los campamentos habitados, las ruinas abandonadas, los templos inhóspitos y todas las otras cosas raras que hay por ahí, en más de una ocasión me quedé perplejo admirando las estructuras, desde las más milenarias y solemnes, hasta las más futuristas pero “informales”, casas con diseños avanzados y complejos, pero que claramente eran el hogar de personas comunes, contrastaban perfectamente con las mega estructuras abandonadas, con estética casi sagrada y tan antiguamente olvidadas que es difícil imaginar cuál podía ser su propósito, aparte de ser monumentos imponentes.

Y el motivo del título,

las grandes partes del mapa, sobre todo las zonas iniciales, están bastante deshabitadas, y son desérticas, lo que instantánea y constantemente me recordó a Journey, y la realidad es que no solo tenía esa “vibra” en lo estético, sino que se sentían como experiencias muy familiares, hasta el punto que a veces me olvidaba que estaba jugando Sable y pensaba que estaba en Journey otra vez, diría que con la excepción de un compañero casi mudo, pero en realidad, al pasar un rato subido en mi moto, Simoon, casi podría decir que sentía la “vida” que emanaba mi nave, por momentos mientras iba a máxima velocidad podía escuchar como un “latido” que escapaba de sus entrañas metálicas,

y después de explorar cada ruina y recobeco, un solo sonido, hacía que mi compañero respondiera y acudiera inmediatamente a mi llamado,

y es que no solo los llamados de mi personajes y los sonidos de mi moto destacaban, el audio en todo este juego es magistral, cada pisada tiene un sonido distinto dependiendo en la superficie, el sonido del viento te golpea y toma por sorpresa mientras exploras, las ramas de los árboles, los personajes, animales y hasta las construcciones, todos emitían sonidos únicos, pero si vamos a hablar de placer para el oído, tengo que mencionar la música 

No hace falta que diga nada en realidad, escuchar el tema es más que suficiente, esto es lo mismo que suena cuando abandonas la zona tutorial, mientras exploras el mundo de verdad por primera vez, y es simplemente perfecto.

El otro tema zarpado que tengo que mencionar es

El nombre es un poco básico, pero suena increíble, y aparte, es la musica del menu principal (evidentemente, de ahí el nombre) y lo vas a estar escuchando cada vez que abrís el juego, o en mi caso, cada vez que me este rompiendo la playlist de este juego. Y si estuvieron prestando atención, se habrán dado cuenta de otra cosa importante, los temas no solamente son lindos, sino que además, con sus letras transmiten parte del mensaje del juego, cosa que en mi opinión lo hace todo, muchísimo mejor.

Se que llega un poco tarde, pero siguiendo con el tema de los “sentidos” pasamos de audio a vídeo y es que este juego es hermoso visualmente, no solo que la dirección artística es increíble, sino que los colores, son super cálidos y reconfortantes, y creo que es una de las claves para que este juego, de las sensaciones que da, es simple pero efectivo.

Mientras jugaba, estaba buscando algunas “narrativas” como misiones, o “lore” que me dieran “esas” sensaciones que tuve con Journey, NITW, Horizon Zero Dawn o Remnant from the ashes, y no había mucho “lore” o contexto del mundo, excepto por una serie de conversaciones que tenes con una IA que te revela mensajes antiguos dentro de naves espaciales estrelladas, pero a pesar de mi usual pasión por este tipo de cosas. En este juego, si bien no me parecieron malas, no me hicieron sentir nada, lo mismo me paso con muchas misiones, pero un par destacaron, como “El fantasma de Eccria” esta fue súper interesante, porque parecía estar inspirada en assassin’s creed, y me dio esta escena.

A este punto ya había jugando unas cuantas horas por un par de días y de golpe este momento al inicio del juego resonó bastante conmigo

Y creo que mi amigo tenía razón, en cuanto me olvidaba de todo y simplemente me concentraba en el viaje, el juego se volvía super divertido.

Pero sería mentir si dijera que solo la misión de Eccria me resultó destacable, bastante temprano en mi aventura me encontré con una soldado, Eliisabet. Inicialmente, no me llamó la atencion, pero el personaje me comentó como se había jubilado, y quería explorar el mundo justo como lo estaba haciendo yo, todo en un tono super alegre y simpático, que me resultó agradable después de estar un rato dando vueltas solo por el desierto, me marcó un nuevo punto para explorar en el mapa, así que me generó curiosidad, hasta que me olvide de la misión entre tanta exploración y no recobre mi interés hasta que me encontraba en la ubicación señalada, básicamente por accidente, curiosamente, esta era una de las opciones a elegir en la conversación con Eliisabet,

después de una pequeña charla y unos consejos, me dice que se va en otra dirección, y que a lo mejor nos reencontramos, ahora estaba interesado, no solo por la oportunidad de conseguir más emblemas para mi máscara, sino por tener una cara conocida con la que encontrarme de tanto en tanto y creo que esto, es lo hizo que Eliisabet se convirtiera en uno de los personajes más queridos de mi planeó, la mayoría de personas que me encontraba podían tener algo interesante que compartir inicialmente, pero ya estaba, una vez conversabas con ellos una vez, se quedaban sin nada que decir, y no tenía sentido volver a visitarlos, pero Eliisabet era distinta, no solo cambiaba su posición y te obligaba a visitar lugares nuevos, sino que siempre tenía algo lindo que contar. Y uno de los mensajes más importantes que me dio, fue en el momento más adecuado, justo cuando lo necesitaba.

“No lo pienses demasiado. Conozco esa sensación de que lo que decidas es algo vinculante de por vida, pero no es más que una de las muchas decisiones que vas a tener que tomar. Ni siquiera es la más importante.”

A lo largo de mi aventura cada tanto había una pregunta acechando, qué decisión voy a tomar al final, cual es la máscara que habrá de elegir mi personaje, hasta ahora había recolectado la mayoria, y mas de una sonaba interesante, pero no podía decidirme, esto me alivio la mente por un rato, lo que me permitió continuar mi viaje, un poco triste por que ahora no tenia un punto de encuentro fijo con Eliisabet, pero expectante, por si de casualidad, nos volvíamos a encontrar.

Ya casi al final de mi aventura me quedaban un par de tareas por completar, una era buscar a una trovadora, que estaba perdida por voluntad propia. Y después de buscarla un rato la encontré, meditando en una cueva, de un bioma gris y polvoriento.

Esta es de las mejores partes del juego, super meta, porque es le juego preguntando por sí mismo, el motivo principal del juego, es encontrar tu lugar en el mundo, y Llhor necesita ayuda, así que consulta con otra persona en su misma búsqueda.

<LLHOR>

“Lo que deseo es elegir mi senda y, básicamente, tú estás haciendo ese mismo viaje. ¿Crees que podrías ayudarme?”

Pero yo a nivel personal, juego videojuegos y sobre todo, escribo sobre ellos para expresarme y poder encontrar mi lugar en el mundo lo que resuena con la búsqueda de Llhor, en cierto modo, somos iguales.

La trovadora menciona como estaba muy cómoda con su grupo, el átomo, pero que tuvo que salir de ahí porque sentía inquietud en su interior.

<LLHOR>

“Cuando abandoné la llamada, creí morir.
Sin importar el coste, a algún lado tenía que ir.
Estaba tan lejos ya, que me preguntaba qué podría encontrar.
¿Por un pedazo de mí, mi mente tuve que sacrificar?”

Esto es algo con lo que me sentí muy identificado, aunque disfruto de mi trabajo (de la vida real), no me genera la misma satisfacción, que me dan estos textos, lo que me genera una situación extraña, en la que, cuando mi vida esta “bien” y “estable”, me siento perdido, y al volcarme en la experimentación de distintos juegos y aventuras, tengo que abandonar mi trabajo, para poder encontrarme a mí mismo.

Para cerrar Llhor me hace una última pregunta, 

<LLHOR>

“¿Por qué exploramos?¿Qué nos impulsa a ello?¿Estamos buscando nuestro propósito en la vida?¿O acaso le cumplimos los caprichos a nuestra libertad?”

Sable tiene el mismo pensamiento que yo,

<Sable>

“La verdad es que esta pregunta de Llhor me parece reconfortante.
Es algo que emerge en mis pensamientos una y otra vez, aunque no con tantas palabras. Me pregunto si mi propósito como planeadora es ver cada rincón del mundo… o si es encontrar mi lugar en él”

Y mi respuesta, fue Encontrar un propósito, por eso que que exploro tantos juegos como puedo, y experimento y plasmo mis ideas en textos, para entenderme a mí mismo y encontrar mi lugar en el mundo, y este juego me dio una de las piezas que estaba buscando, a menudo mientras escribo me hago la misma pregunta, ¿Por qué escribo?¿Qué busco entre mis letras?¿Qué quiero comunicar?, la respuesta estuvo siempre ahí, por un lado me busco a mi mismo y después intento imaginarme donde me gustaría estar. Cada vez que hablo en este blog, me siento como que estoy compartiendo una verdad oculta con quienes me leen, y al igual que otras personas, comparten sus verdades ocultas, las cosas que descubrieron y que piensan, y por un lado estoy agradecido con Sable, tanto el personaje como el juego, por haberme permitido revivir un poquito mi mágica experiencia con Journey, pero también estoy agradecido por que me dejaron descubrirme un poco más, al revelarme algo para poder poner en mis textos, y sobre todo, por que ese algo, era la respuesta a una de las preguntas que se me escapaba hace tanto tiempo.

<LLHOR>

“En nuestro interior, hay una flor, la respuesta a la necesidad incipiente.
Pero no podemos esperar, 
así que pasamos a contemplar
el misterio de la simiente”

“No lo pienses demasiado. Conozco esa sensación de que lo que decidas es algo vinculante de por vida, pero no es más que una de las muchas decisiones que vas a tener que tomar. Ni siquiera es la más importante.” –Eliisabet

A veces me paralizo y dudo a la hora de publicar mis textos, todo esto es bastante personal para mi, no solo en los contenidos de los textos, sino que representa una gran parte de quien soy a día de hoy, Nicolas, el chico que programa día por medio, juega videojuegos, e intenta encontrarse entre estos y sus textos. E independientemente de si nadie lee lo que escribo, y si esto es solo un monólogo en un coliseo vacío, a veces me da miedo dar ese paso y exponer una parte de mí, pero voy a intentar seguir los consejos de mi amiga Eliisabet, y simplemente animarme a tomar estas decisiones no tan importantes.

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Palabras finales:

Si llegaron hasta esta parte, de corazón, gracias.

Este fue otro de esos textos difíciles, más que nada porque es super personal.
Me da la impresión que este tipo de escrito (Más introspectivos) se me da mejor que los que son más “analíticos” donde tengo que buscar fuentes y estar justificando mis ideas. De todas maneras hay cosas que se me quedaron en el tintero, así las tiro por acá, hace poquito jugue al nuevo zelda (Breath of the Wild), no escribí nada, por que si bien me gusto no me dio nada como para escribir por ahora, pero el gameplay de este juego se parece bastante en algunos momentos al del zelda, más que nada el tema de la escalada y la energía, pero muuchoo más tranquilo, en un punto mientras jugaba zelda me estaba cansando de luchar constantemente, y termine rusheando un poco el final, una pena, pero acá no me paso, mas que nada por que no hay combate, un poco me apure a el final por que esto lo juege desde el gamepass y no queria quedarme sin antes de poder jugar algo más, ya se, una boludez, al final jugué Outriders, bastante interesante, una mezcla entre The division 1 y Remnant from the ashes, muy bueno, pero la historia me dejo con mas preguntas que otra cosa y es obviamente un juego de grindeo, así que me pase la campaña y lo deje.

Por otro lado me copó bastante como el mundo se parece al del Horizon, en el sentido que, tenes una zona inicial, que se siente enorme, y que hace las veces de tutorial, pero que en cuanto termina y te largan al resto del juego se siente enana. Todavía tengo pendiente ese texto sobre el Horizon. . .